
Trituradora de piedra de cuarzo
El cuarzo es un mineral compuesto de dióxido de silicio (SiO₂), caracterizado por su alta estabilidad física y química. Posee propiedades como fragilidad, piezoelectricidad y piroelectricidad, entre otras.
Tras su fundición, puede transformarse en vidrio. Los productos derivados del cuarzo, como las tuberías de vidrio, también se emplean en la fabricación de cerámicas, refractarios, materiales abrasivos, componentes metalúrgicos, productos químicos, electrónicos, aeroespaciales, de construcción y otras materias primas industriales.

Aplicaciones
El polvo de cuarzo se clasifica en cuatro tipos según su granulometría:
Polvo grueso (0–3 mm)
Polvo fino (malla 20–400)
Polvo ultrafino profundo (malla 400–1250)
Micropolvo (malla 1250–3250)
Los bloques grandes de piedra de cuarzo se reducen mediante una trituradora hasta alcanzar el tamaño de alimentación requerido (entre 15 mm y 50 mm), que luego puede ingresar al molino.
Los fragmentos de cuarzo triturado son transportados al silo mediante un polipasto, y posteriormente alimentados al molino a través de un alimentador vibratorio, donde se realiza la molienda.
Recomendación de equipos según el tipo de polvo:
Para polvos finos:
Molino vertical LM, molino europeo MTW y molino de rodillos pendulares MRN.
Para polvos ultrafinos:
Molino vertical ultrafino LUM y micromolino MW.
Para polvos gruesos:
Molino europeo de polvo grueso y molino centrífugo directo.
El polvo de cuarzo triturado se separa mediante un clasificador. Las partículas que no cumplen con el tamaño requerido se redirigen nuevamente al molino para ser reprocesadas.
El polvo fino, al adaptarse al flujo de aire, es transportado por tuberías hasta el colector de polvo, donde se realiza su separación y recolección. El producto final, capturado por el sistema de distribución, se transfiere al contenedor de producto terminado y se envasa de forma automatizada, ya sea mediante un camión cisterna o una envasadora industrial.
